La gran nación de Norteamérica,cuna del sueño americano, de la famosa barbacoa, la de la misa de los domingos. Dios,Libertad y Justicia comenzaba una de sus peores crisis de identidad a finales de unos muy turbulentos años sesenta. La guerra de Vietnam,Nixon y el caso Watergate,las cientos de revueltas sociales, la crisis económica que afectaba a la nación y la elevada criminalidad tenían cada vez más desperfilada a la llamada "sociedad perfecta" que antes era denominada como un brillante y despejado way of life.
El cine gringo de esta decada los setenta se salpica de toda esta turbulencia,lo que permitió que nunca más Hollywood haya sido tan explícitamente, sucio e incómodo. En este contexto el género de terror alcanza su una gran madurez, dejando atrás mucha de su inocencia lúdica y aferrandose a la realidad para transformarse en uno de los reflejos más significativos de la nueva pesadilla del sueño americano; el psicokiller se transforma en el protagonista y algo de manierismo gótico aún se mantiene, se recicla con connotaciones más mundanas.
El satanismo,ocultismo y derivaciones, traido a la pantalla en forma magistral con dos obras maestras como El Bebé de Rosemary y El exorcista, se lleva en esta película, hacia la creación de una especia de subtexto en el que no es difícil darse cuenta de las lecturas sociales que tiene. El demonio ya no es sólo la encarnación del mal abordado por el cristianismo, sino una interpetación de toda la crisis general (ideológica, económica, religiosa y un largo etcétera) de la sociedad estadounidense, en todas sus vertientes y a través de todas las perspectivas y posicionamientos moralmente "aceptables".
En este punto, "La centinela" se muestra, de una forma bastante expicita, como un film de tesis que defiende la moral cristiana frente a la banalidad de las costumbres de la "era Moderna",que se puede ver representada por una conjunto de vecinos psicópatas que están esperando quien les abra la puerta del infierno para salir.
La película dirigida por Michael Winner cuenta la historia de Alison Parker, una joven, modelo de profesión, y de cristiana sensibilidad, La cual vivía en una permanente angustiada por episodios de infidelidad que sufrió, además de dos intentos de suicidio que se suscitaron por estos episodios. Por una parte, descubrió las correrías degeneradas de su propio padre, además de ser amante de un hombre que estuvo casado hasta la muerte "accidental" de su legítima esposa. Pero sus verdaderas pesadillas empiezan cuando se muda a un departamento en el que tiene unos peculiares vecinos –no me explayaré mas por ahora- es aquí donde comienza el delirio y los fantasmagóricos acechos.
El personaje de Chris Sarandon es una algo así como un "santo contemporáneo" –pocas dudas deja al respecto el final-, todo esto suscitado por lo turbio y descarrío de su propia vida, muy de acuerdo con los nuevos aires de modernidad, y por esta supuesta encarnación del mal, más allá de su propio departamento. Esta idea de lo satánico al otro lado de la puerta es claramente una alusión a "El bebé de Rosemary", aunque lo que en el film de Polanski era un retrato frío y distante de las pequeñas situaciones cotidianas y del deterioro psicológico de la protagonista se convierte en esta película en un freakerio de seres y personajes bastante frenético.
Con muchos aciertos y defectos, La centinela es una mezcla argumental que se desarrolla a tropezones con rápidos cambios de escena, en el que se mezclan elemnetos del suspense policial, los delirios de la protagonista,la trama de tintes religiosos y el terror gótico de toda la vida, mucho ruido nocturno y un sinfin de claroscuros, condimentado con desvergonzados y generosos ingredientes gore.
Con un resultado bien tosco pero que resulta bastabte entretenido,como diria alguien por ahi sólo rock, en el que destaca el crescendo de terror cada vez más truculento, que culmina en la locura final –con una escena de antológica- en el que incluso se utiliza a verdaderos personajes con defectos físicos dignos de los mas famosos freakshow de antaño.
Hay que tener ojo con el elenco, una extraña mezcla de antiguas glorias –destacándose una inquietante Ava Gardner, quien se manda una frase de esas que sólo tiene el cine y que resume la película, los neoyorquinos sólo piensan en el dinero y el sexo-, y algunas "promesas" que ahora son grandes estrellas, como los jovencísimos y de personajes muy, pero muy secundarios Christopher Walken, Jeff Goldblum o Tom Berenguer.
Si bien "The Sentinel", no llega a la elite del cine de terror de los años 70,se puede tomar como un buen ejemplo de muchas de las caracteristicas que tuvo el cine de terror dicha década, en cuanto a tema, la interpretación del horror físico y, sobre todo, a su trasfondo : la crisis de los valores tradicionales, de la desorientación del individuo que habia en USA en esos años.
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